Planificación del estudio geotécnico – número de reconocimientos

21. Planificación del estudio geotécnico – número de reconocimientos

Una de las primeras cuestiones a concretar cuando se planifica un estudio geotécnico es determinar qué número de reconocimientos va a ser el necesario (o, las más de las veces, ante las habituales estrecheces presupuestarias, cual va a ser el mínimo justificable).

Fuente imagen: Diario de Navarra

Volviendo al contexto que nos ocupa, que es el de la edificación, el Código Técnico de la Edificación establece de forma estricta el número mínimo de reconocimientos en función de dos parámetros de sencilla estimación:

• La dimensión en planta del edificio, dato deducible de las premisas que la aplicación solicita al usuario sobre la superficie ocupada por el edificio y el número de plantas, de la cual se obtiene el área ocupada por la construcción (“A”).
• La bondad de las prestaciones geotécnicas del emplazamiento, valorada en función de las expectativas de cimentación locales, que puede ser incorporada en la aplicación de forma sencilla.

Es posible sistematizar la previsión sobre las prestaciones geotécnicas del subsuelo en función de la estimación de cimentación habitual en el entorno de la parcela (o la previsible en la parcela en cuestión) consistente en:

• Terreno del grupo T1 – edificios cimentados mediante elementos aislados (zapatas aisladas o continuas) con tensiones de servicio del cimiento moderadas o altas (≥ 150 kPa).
• Terreno del grupo T2 – edificios cimentados mediante elementos aislados con tensiones de servicio del cimiento bajas (< 150 kPa), o bien apoyados sobre cimientos semiprofundos adoptando tensiones de servicio moderadas a altas.
• Terreno de los grupos T2 – T3: edificios cimentados sobre losas continuas o cimientos profundos, o suelos con problemas geotécnicos significativos (expansividad, colapso, rellenos antrópicos que condicionen el tipo de cimentación, zonas con problemas de estabilidad global, suelos de alta deformabilidad…) que requieran de soluciones de cimentación específicas.

Estableciendo el tipo de construcción y el grupo del terreno, se define la distancia máxima (“d_máx”) entre reconocimientos (a partir de la tabla 3.3 del DB SE-C).

El grupo de terrenos T3 incluye una variedad de casos para los que la aproximación de estudio es muy distinta, aún a pesar del que el DB SE-C resuelva su enfoque con un parco «En caso de terrenos del grupo T-3 o cuando el reconocimiento se derive de otro que haya resultado insuficiente, se intercalarán puntos de reconocimiento en las zonas problemáticas hasta definirlas adecuadamente».

A título de ejemplo, dentro de este grupo se pueden presentar, entre muchas otras, las siguientes situaciones, que poco tienen que ver unas con otras:

• Terreno con unas prestaciones geotécnicas muy desfavorables (p.e. muy compresible, para el cual las opciones de cimentación profunda resulten obligadas) caso en el cual la campaña deberá ser obligadamente más extensiva (en número y profundidad de reconocimientos) que en el caso de un terreno T2.
• Terreno de excelentes prestaciones geotécnicas – caso de un subsuelo rocoso competente – en una parcela con una pendiente de 20º, para el cual una campaña de reconocimiento del grupo T1 sería suficiente si el enfoque del estudio geotécnico se adapta a las necesidades del análisis de estabilidad global requerido por el proyecto, siendo deseable ampliar la campaña no tanto con prospecciones profundas (sondeos), sino con datos de geología de superficie (estaciones geomecánicas) que permitan, por ejemplo, una mejo valoración de la influencia de las discontinuidades en la estabilidad de las excavaciones provisionales (algo para lo que los datos obtenidos de los sondeos no son ni completos ni los más adecuados).
• Terrenos uniformes expansivos o colapsables: el enfoque del estudio deberá tender a incrementar la campaña de trabajos de laboratorio por encima de lo que es habitual, pues para estos tipos de suelos (cuando se trata de unidades geológicas extensas) lo que prevalece es la necesidad de afinar en los parámetros cuantitativos del fenómeno a estudiar. Incrementar en número y profundidad los reconocimientos no aportará la información que realmente es necesaria para el análisis del caso.

Obviamente, en en otros «terrenos desfavorables», es el enfoque del estudio geotécnico el que debe adaptarse al problema, sin que para todos los casos se resuelvan las necesidades del proyecto incrementando el número de puntos o las profundidades de estudio.

La partida presupuestaria referida a la movilización, traslado de maquinaria y emplazamientos en puntos de reconocimiento se determinará como sigue:

• M: Movilización de maquinaria por estudio: 1 unidad por máquina movilizada
• N: Emplazamientos en «n» puntos de reconocimiento: n – M

La medición de emplazamientos se aplicará exclusivamente a los sondeos mecánicos, no así en caso de ensayos de penetración que puedan substituir a sondeos, dado que para los mismos se acostumbra a establecer un metraje mínimo de abono en el cual se incluye el emplazamiento de máquina en punto de reconocimiento.

Establecido el marco general de la campaña, y considerando que cada punto de reconocimiento es representativo de un área circular cuyo radio representa la mitad de la distancia máxima entre puntos (d_máx, distancia que se ha definido anteriormente según las especificaciones del DB SE-C), el autor de este blog propone obtener el número de reconocimientos prescritos (“n”) de la siguiente expresión:

n = A / [ π (d_máx /2)² ]

En cualquier caso, el número mínimo de reconocimientos no será inferior a 3, considerando una distribución en planta tal que asegure una correcta interpretación de la estructura del subsuelo con una visión «tridimensional», y se adaptará tanto a las necesidades de información del proyecto (que puede demandar un reconocimiento más intenso en las zonas con apoyos de mayor carga o en las que los desmontes sean más importantes), como a las expectativas geológicas del emplazamiento (debiendo concentrar los esfuerzos en zonas geotécnicamente problemáticas, sin desatender las que presuntamente no lo sean).

Se deberán evitar (…o sospechar de…) replanteos de sondeo como el que figura en el siguiente esquema de situación: